A partir del informe observacional de la temporada 2020/21 en la Liga de Primera A de futsal AFA Masculino y su posterior análisis estadístico, quedaron evidenciadas no solo las características de la competencia nacional, sino también, algunas características que posee la disciplina a nivel mundial.

Si bien los números y variables a analizar son muchas, dependerá del ojo y la capacidad de quien los interprete poder aplicarlos para nutrirse de ellos. La estadística tiene como objetivo principal facilitar la recolección de datos y organizarlos de una manera tal que se puedan obtener conclusiones a partir de los datos numéricos en pos de conseguir el éxito deportivo.

Para que estos datos sean fiables se requiere el análisis global, multidimensional y cuantitativo de situaciones similares con el objetivo de sortear la varianza que puede generarse en el corto plazo o en un momento determinado. Lo explicaremos mejor con un ejemplo por fuera del ámbito futbolístico: si realizamos una encuesta respecto de quien debe ser el próximo presidente de la nación en una ciudad de cinco mil habitantes, de una localidad determinada del país, que tienen necesidades puntuales y modelos de vida semejantes, lo más probable es que el resultado no refleje lo que los 44 millones de argentinos opinan al respecto.

Algo similar ocurre con el análisis estadístico en el fútbol. Cuando tomamos una muestra reducida de goles o pocos partidos de una temporada entera, lo más probable es que no obtengamos los mismos resultados que si analizamos la totalidad de los goles o partidos de una misma temporada. Esto es debido a que en el corto plazo o durante un momento determinado hay una varianza que impide que se refleje la realidad.

Puede ocurrir que seleccionemos 20 goles y entre ellos aparezcan 10 que fueron de pelota parada, pero eso no significa que el 50% de los goles de una temporada se generan por esa vía. Por eso es fundamental que el análisis se haga con una muestra significativa de casos que permitan sortear la varianza que puede generar un momento determinado.

Una vez que obtengamos los resultados numéricos, basados en una gran cantidad de situaciones, tendremos otra cuestión a resolver: saber interpretar los mismos y entender cómo pueden ser aplicados para mejorar el rendimiento de nuestro equipo y conseguir el éxito deportivo.

A continuación, individualizo a modo ejemplificativo algunos supuestos en los que podemos aplicar la estadística basándome en lo que ocurrió en la última temporada de futsal.

1) Establecer prioridades y objetivos en la planificación de los entrenamientos teniendo en cuenta lo que ocurre con mayor frecuencia en la competencia:

Esto es de suma importancia para poder planificar entrenamientos que se basen en las exigencias que tendrán los jugadores a lo largo del torneo. Durante el último torneo disputado los equipos contaban con poco tiempo entre partido y partido (3 o 4 días) por lo que establecer prioridades a la hora de diagramar los entrenamientos cobraba mayor importancia. A partir de la información estadística que obtenemos de la competencia no solo podremos crear tareas o ejercicios simulando lo que suele suceder en esta, sino que también podremos establecer preferencias a la hora de inclinarnos por un aspecto a trabajar u otro.

A nivel colectivo:

Ejemplo 1: el 75% de los goles que se generaron a través de remates desde la zona 3 (bandas laterales del campo de juego) fueron impactados con el empeine.

Su razón principal responde a la potencia que puede imprimir dicha parte del pie en la pelota, además debemos tener en consideración la facilidad que posee el arquero para ubicarse correctamente ante el disparo logrando cubrir una gran superficie del arco.

A través de este dato estadístico comprendemos que la parte más eficaz para golpear la pelota desde esta zona y con destino al arco es el empeine. Esto nos da la posibilidad de generar una pauta (integrándola a una tarea o ejercicio) para rematar al arco desde este sector aun sin conocer las razones específicas de su efectividad.

Ejemplo 2: en el 82,50 % de los goles realizados a través de transiciones intervienen dos o tres jugadores y el 84 % de esos casos son generados con dos pases previos como máximo.

En este caso puntual, mientras menos pases o jugadores intervengan en la jugada, más rápido finalizará la misma, impidiendo así que la defensa rival se acomode y posibilitando la superioridad numérica a la hora de definir.

A través de este dato estadístico podremos recrear ejercicios o tareas de entrenamiento que tengan como objetivo la finalización rápida de la jugada, limitando la cantidad de toques y el tiempo de definición en pos de recrear una situación de juego que posteriormente se reflejará en la competencia.

Ejemplo 3: las acciones de pelota parada encuentran su mayor eficacia cuando intervienen solo dos jugadores.

Tanto en los tiros libres, laterales y saques de esquina será fundamental que el finalizador de la jugada realice un movimiento previo al pase de apertura que le permita desmarcarse y conseguir una ventaja espacio-temporal respecto de su marcador.

A su vez, la existencia de un pase de apertura previo al remate al arco y la intervención obligatoria de dos jugadores como mínimo implica que el arquero debe reubicarse rápidamente teniendo en cuenta varios factores: su propia ubicación respecto del arco, la trayectoria y velocidad del pase, la ubicación del posible rematador, y otras variables que deben ser analizadas en pocas milésimas de segundo. Todo esto dificulta la intervención del arquero en forma eficaz.

En esta oportunidad, a través de un dato estadístico, podemos detectar pautas exitosas para el armado de una jugada de pelota parada.

A nivel individual

Ejemplo 4: en lo que refiere al entrenamiento en forma específica del arquero, podemos observar que el 60 % de los goles se generaron en la zona baja del arco (desde el suelo hasta 0,66 cm).

A partir de esta circunstancia detectamos que habrá que otorgar un tiempo razonable al entrenamiento de los gestos técnicos vinculados con la intervención del arquero en las zonas bajas del arco en pos de aumentar su efectividad (cruz, caídas laterales bajas y la caída de pies, también conocida como paso de valla o spagat).

La zona baja del arco es la más propensa a recibir goles por varias razones:

A) La razón principal es que el arquero posee menor precisión para desviar o despejar remates con sus miembros inferiores (a comparación de los miembros superiores).

B) La mayoría de los remates suelen darse desde zonas próximas al arco y con una gran potencia, lo que implica que el arquero posee poco tiempo de reacción para intervenir correctamente. Mientras menos tiempo de accionar tenga el arquero, más difícil le será realizar una caída baja de manos, dado que para ejecutar este gesto técnico se requiere acomodar los miembros inferiores y el torso de forma tal que posibilite que los miembros superiores intervengan en la zona baja del arco.

C) Los miembros inferiores son los que más cerca se encuentran del suelo para reaccionar ante un remate bajo, pero por su anatomía no tienen posibilidad de retener la pelota. Esto implica que el despeje o desvío con los miembros inferiores genere una segunda jugada de riesgo si no se ejecuta correctamente.

Ejemplo 5: el 50% de los saques de mano que se realizan a lo largo de una temporada son a ras del suelo, a través del gesto técnico denominado saque de “bowling” El segundo más utilizado es el saque de hombro (béisbol), con un 17%.

Este saque a ras del suelo es la principal herramienta que poseen los arqueros para reanudar el juego sin poner en disputa la pelota, ya que facilita ampliamente el control para el compañero de equipo.

Este dato estadístico nos dará la pauta de qué saques deben manejarse con un alto grado de versatilidad al ser los más utilizados por el arquero durante la competencia.

Ejemplo 6: la acción defensiva más utilizada por el arquero es el desvió (con la mano o el pie), siendo de menor utilización la retención o blocaje del remate.

Como mencionamos anteriormente, la mayoría de los remates son efectuados desde zonas cercanas y con gran potencia, lo que implica que para el arquero sea muy difícil posicionar las manos de forma tal que se pueda retener la pelota.

Otro factor a tener en cuenta es que la mayoría de los arqueros de la primera división no utiliza guantes a la hora de atajar por lo que aún se dificulta más la contención del remate.

Este dato estadístico nos indica que no debemos priorizar que el arquero retenga la pelota, sino enfocarnos en que el desvío de la misma sea en forma direccionada con el objetivo de evitar una segunda jugada de riesgo.

2) Elaborar pautas de accionar defensivo y ofensivo que se basen en lo que estadísticamente resulta más beneficioso para nuestros intereses:

A través de la estadística podemos generar pautas de comportamiento que minimicen las situaciones de peligro para nuestros intereses y que potencien aquellas que nos puedan resultar provechosas.

Ejemplo: si estadísticamente sabemos que el 43% de los goles se obtienen desde la Z1, intentaremos crear situaciones dentro de nuestro modelo de juego que aumenten las probabilidades de finalizar desde ahí y, de igual forma, haremos lo opuesto, es decir, intentaremos minimizar las finalizaciones del rival desde dicha ubicación.

3) Analizar estadísticamente al rival de turno con el objetivo de encontrar información que nos pueda ser de utilidad a la hora de planificar el entrenamiento previo a la competencia:

En este punto hago hincapié en el análisis estadístico del juego del rival para saber cuál es su modelo o sistema de juego, características, virtudes y falencias. También podremos aplicar la estadística para detectar en qué zonas del campo o del arco suele o le suelen convertir, a través de qué situación de juego convierte o recibe goles, entre otras cuestiones.

La información proporcionada por la estadística podrá ser utilizada al momento de planificar el entrenamiento previo al partido con el rival de turno con el objetivo de explotar sus falencias y aminorar el riesgo de sus principales armas de ataque.

Ejemplo 1: el caso más emblemático es el de Villa la Ñata, que utilizó la herramienta del arquero jugador desde el comienzo del partido, logrando convertir un total de 18 goles a lo largo del campeonato (casi quintuplicando a Racing y Boca, que fueron los segundos con 4 goles).

Ejemplo 2: Kimberley fue el que más goles consiguió a través de las acciones de balón parado (lateral, córner y tiro libre) con un total de 7 tantos.

Ejemplo 3: Barracas central fue el equipo que más goles género a partir de las rápidas transiciones y los robos con un total de 15, seguido de Racing con 11.

Si tomamos el primer ejemplo, podríamos planificar el entrenamiento focalizándonos en la defensa del arquero jugador, la presión alta para evitar el despliegue del mismo, la práctica de los disparos rápidos desde zona 5 y de remates por parte del arquero desde su propia área con el arco contrario vacío, con el objetivo de contrarrestar las herramientas utilizadas por Villa la Ñata.

4) Controlar las cargas en los entrenamientos:

A través de la recolección y simplificación de datos durante una jornada de entrenamiento es posible determinar qué carga física soportaron los jugadores para así no generar una sobreexigencia para la competencia y evitar lesiones o molestias musculares.

5) Brindar información sobre el accionar de jugadores rivales:

La estadística también se puede usar para conseguir información de los jugadores del equipo rival y que puede ayudar a los protagonistas a tomar mejores decisiones durante el partido.

Algunos ejemplos:

Andrés Gerarthy convirtió 10 goles a lo largo del torneo y todos fueron de zurda, utilizando predominantemente la parte interior del pie para efectuar los remates.

Pablo Vidal convirtió un total de 11 goles de los cuales 8 fueron efectuados desde la Z1 (dentro del área), siendo la zona baja derecha (ZBD) su sector predilecto para la definición. A su vez, 10 de los 11 goles fueron convertidos con su pierna zurda.

Eduardo Maldonado convirtió un total de 14 goles de los cuales 8 ingresaron por la zona baja del arco (Z1). De los 14 goles convertidos, 6 fueron de zurda y 8 de diestra, lo que evidencia el manejo de ambos perfiles a la hora de rematar.

Ismael Maldonado convirtió un total de 13 goles de los cuales 9 de ellos ingresaron por la zona baja del arco y 6 de esos 9 goles se convirtieron en la ZBM (zona baja media). A su vez, de los 13 goles totales 10 fueron convertidos con su pierna diestra, uno con la zurda y los otros dos con otras partes del cuerpo.

Esta información puede ser tenida en cuenta para incomodar a nuestros adversarios a la hora de definir, conocer sus preferencias en ataque, saber en qué zonas del campo se sienten cómodos para rematar, qué sectores del arco son los más buscados y la posibilidad de definir o no con ambos perfiles, reduciendo así la posibilidad de verse superado por el adversario.

6) Obtener información respecto de las zonas más escogidas por los ejecutantes de sextas faltas o penales:

Hacer un análisis estadístico de las zonas más seleccionadas por los ejecutantes nos dará la posibilidad de utilizar esta información para reducir el factor suerte a la hora de contener alguna de estas acciones.

Ejemplo: 17 de agosto y Boca Juniors ejecutaron en siete ocasiones hacia la ZBD (zona baja derecha) sobre un total de once ejecuciones.

7) Analizar rendimientos desde el punto de vista estadístico en una temporada completa:

También podremos analizar estadísticamente a los jugadores que integran nuestro plantel para obtener información adicional a la hora de analizar rendimientos a lo largo de una temporada. Algunos datos que nos pueden marcar las estadísticas:

Respecto de jugadores de campo: promedio de minutos jugados por partido, goles, asistencia, pases concretados, pérdidas, robos, tiempo promedio de posesión con la pelota, kilómetros recorridos, etc.

Respecto del arquero: intervenciones por partido, goles recibidos, goles evitados, saques de arco efectuados, saques con la mano efectuados, asistencia, distancia recorrida, pérdidas, etc.

8) Utilizar la estadística para buscar un jugador en el mercado acorde a las necesidades que tengamos como entrenadores:

La información proporcionada por la estadística puede ser utilizada para buscar jugadores que se adecuen a las necesidades que tenemos en nuestro plantel en caso de que pretendamos realizar una incorporación o que tengamos la necesidad de reemplazar a un jugador que se haya ido. A partir de los datos numéricos, podremos seleccionar atributos o características que deseamos que posea el jugador a incorporar, como puede ser la cantidad de goles, asistencias, robos, pérdidas, pases concretados, etc.

9) Utilizar la estadística en pos de obtener información a la hora de realizar una convocatoria para la selección nacional:

De la misma forma que la estadística puede ser utilizada para incorporar jugadores a un plantel, también puede ser empleada para la realización de una convocatoria para una selección nacional. El técnico podrá apoyarse en la información obtenida para comparar los rendimientos de dos jugadores de características similares para decidir a cuál convocar.

10) Verificar nuestra apreciación subjetiva:

La estadística nos da la posibilidad de verificar si nuestra apreciación o criterio subjetivo se corresponde con la realidad (o, mejor dicho, con lo que objetivamente es comprobable) con el objetivo de no cegarnos por nuestra visión estructurada y corroborar nuestro parecer desde otro punto de vista.

Conclusiones: la estadística nos sirve como herramienta para simplificar la realidad en términos numéricos y así detectar patrones determinantes para el éxito deportivo. Dicho esto, su máximo potencial radica en la oportunidad de interrogarnos por qué ese factor es exitoso y así comprender la lógica del juego. En ningún caso nos brindará la respuesta directa, sino que nos dará un indicio en el que tendremos que ahondar para entender su razón de ser, y así avanzar hacia un aprendizaje más significativo y a la creación de tareas o ejercicios más eficaces.

Si bien los hechos pasados no garantizan acciones futuras, es nuestro deber como entrenadores trabajar para intentar minimizar la incertidumbre (sabiendo que es totalmente imposible) y así aumentar las probabilidades de obtener éxito en nuestros equipos.

Por: Alan Holsinger.

Informe observacional de la temporada 2020/21 en la Liga de Primera A de futsal AFA Masculino: https://drive.google.com/file/d/1QZWBsZ0ZhTgLeKUhT_u5VcvfrdKFgCet/view

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