Capitana, estandarte, campeona en reiteradas ocasiones con San Lorenzo de Almagro. Hablar de Eli Medina es hablar de parte sustancial del club azulgrana. A pesar de ya no formar parte del equipo de futsal, se mantiene como uno de los grandes nombres de la disciplina. Futsalargentino.com habló con la jugadora para conocer más de su historia de amor con la redonda.



Con recorrido tanto en fútbol 11 como en futsal, Eli Medina se mantiene hasta el día de hoy como la futbolista con más títulos en la institución que tiene como presidente a Marcelo Tinelli. Además de las 23 copas con su evidente peso específico, también fue una de las futbolistas que formó parte de la icónica primera firma de contratos profesionales del fútbol femenino en nuestro país. Todos estos logros parecen ser el resultado final de un camino que empezó hace bastante tiempo: “En 2004 cuando llegué a San Lorenzo, se suma el futsal a AFA y por suerte también al club, se dio de que podía hacer las dos cosas. Y bueno, es fútbol y todo lo que tenga que ver con una pelota me atrae, así que ni dudé cuando me lo propusieron”.

Tal vez para algunos puede resultar una exigencia física bastante importante la de practicar dos disciplinas que, si bien pueden llegar a considerarse complementarias, mantienen diferencias. Sin embargo, hace unos años para Eli no fue de esta manera. ¨Me sumó mucho el estar todos los días entrenando. Esa dinámica que te da el futsal me sirvió mucho para llevarlo a fútbol de campo¨.

El Ciclón le dio la atmosfera propicia para que se desarrollara de la mejor manera y para que, a su vez, cosechara recuerdos imborrables: “San Lorenzo sin ser profesional aún, siempre nos trató como tal. Nosotras siempre tratamos de ser lo más profesionales porque así lo demanda un club tan importante, pero hoy tenemos mucha más visibilidad, cosa que antes quizás no existía. Tengo un recuerdo que nos marcó y que rectificó lo que para mí es San Lorenzo: el estar siempre unidas sin importar el marcador. Sabemos que si somos fuertes como grupo se puede dar cualquier resultado, como en 2018 contra Sportivo Barracas. Perdimos la primera final 4 a 0, fuimos a la segunda con una desventaja muy importante, pero en la semana nos propusimos ser fuertes como grupo, sabíamos que solo así podíamos darlo vuelta. Ganamos la segunda final 4 a 0, fuimos a penales y lo ganamos”, de esta manera la jugadora relata lo que fue la épica remontada para quedarse con el Clausura de ese año.



¿Fue una decisión compleja para ella el dejar el futsal para seguir compitiendo en 11? “La verdad que fue una decisión difícil por lo que significa el fútbol para mí. Pero ya sentía que no estaba al 100% en las dos actividades y no puedo darle eso al club, tenía que enfocarme en una de las dos y decidí por campo. Porque si bien tengo 2 torneos ganados, quiero uno más y solo dando el 100% puedo ayudar al equipo para pelear por eso. Dejar a un lado al futsal por un tiempo es algo difícil”, cuenta. Además de su faceta puramente deportiva, también colabora con las divisiones inferiores en su formación.

Por último, expresó sus deseos de que la disciplina siga creciendo en su rama femenina en todo el país y aspira a una no tan lejana profesionalización del futsal: ¨Espero y deseo que siga creciendo mucho más, es un gran comienzo, pero necesitamos mucho más para seguir creciendo. Es el camino, pero debemos seguir luchando. Creo que el futsal tiene mucho por explotar, ojalá que en algún momento la profesionalización suceda. Es mi deseo para el futsal, las más chicas merecen vivir esa experiencia¨.

Por: Belén Medina.

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